Se acerca la presentación del Impuesto de  Sociedades y resulta interesante recordar que las empresas que realizan actividades de Investigación y Desarrollo pueden obtener deducciones en su tributación.

El Ministerio de Economía, Industria y Competitividad favorece el impulso de la actividad de innovación mediante deducciones fiscales y bonificaciones. Además, los incentivos fiscales aplicados en España son uno de los más altos de Europa, llegando a deducir hasta el 42% de los gastos relacionados con Investigación y Desarrollo y/o Innovación Tecnológica.

Las empresas que realizan inversión en actividades de I+D tienen la oportunidad de beneficiarse de estos incentivos fiscales. Pueden acogerse a esta deducción todas las empresas que realicen proyectos de investigación y desarrollo y/o innovación tecnológica. Sin tener en cuenta el tamaño, facturación o sector. Tampoco existe un límite presupuestario definido.

Los beneficios fiscales que pueden obtener las empresas mediante el Impuesto sobre Sociedades están relacionados con los siguientes factores:

1. Deducción por actividades de investigación y desarrollo. Entre las actividades que contempla este incentivo fiscal encontramos:

• El importe de los gastos de investigación y desarrollo. Obteniendo el reembolso del 25% de los gastos efectuados durante el ejercicio.
• Inversión en elementos de inmovilizado material e intangible, excluyendo las inversiones en edificios y terrenos. Siendo deducible el 8% de las inversiones en inmovilizado material e intangible, siempre y cuando los elementos estén destinados exclusivamente a las actividades de investigación y desarrollo.
• Gastos de personal empleado en actividades de investigación y desarrollo. La empresa puede conseguir una bonificación del 40% en las aportaciones empresariales a las cuotas de la Seguridad Social para el personal empleado en actividades de investigación y desarrollo.

2. Deducciones por innovación tecnológica. Se consideran como gastos atribuibles aquellos que estén relacionados con alguna de las siguientes actividades:

• Identificación, definición y orientación de soluciones tecnológicas avanzadas
• Diseño industrial e ingeniería de procesos de producción.
• Adquisición de tecnología avanzada ya sea en forma de patentes, licencias, «know-how» o diseños.
• Obtención del certificado de calidad ISO 9000, GMP o similares.

Las deducciones por innovación tecnológica pueden suponer el 12% de los gastos efectuados durante el período impositivo.

Si tu empresa realiza actividades de Investigación y Desarrollo o Innovación Tecnológica, aprovecha las bonificaciones fiscales en el Impuesto de Sociedades.